MEDICOS DE DOLORES

¿Y SI ADEMÁS DE LA TRAGEDIA, DESPUÉS,NO TODO SALÍA BIEN? Un Accidente de un Tren con un Colectivo lleno de gente,con 17 muertos y más de 60 Heridos, en la oscuridad de la madrugada de un Pueblo chico,conocido más por el olor de sus parrillas de ruta que por cualquier otro motivo,con un Hospital en el que sólo queda por la noche un médico y tres enfermeras,que de golpe es tapa de diarios de todo el mundo…Y todo salió bien.. Policías,bomberos,médicos,enfermeras,pobladores ignotos.etc actuaron e interactuaron de una manera increíble, como si estuvieran acostumbrados a hacerlo.Y todo salió bien.. Sólo se escucharon elogios y felicitaciones desde todos los ámbitos,lo cual fue más importante aún ya que el País nos miraba con una lupa. Todo salió bien después de la tragedia..No pudo ser por azar.Creo que a veces la simplicidad y sencillez de las medidas que se toman hacen parecer que todo fluye porque si.Me interesaba que uno de los responsables en tomar esas medidas relatara su experiencia de ese dia interminable, por lo que le pedí a Roberto Capiel que la escribiera; y acá está..en su clásico lenguaje desacartonado. “Sergio de acuerdo a lo que me pediste voy a intentar expresar lo ocurrido en el hospital el día del accidente:

Creo sin ninguna duda que las cosas no ocurren por que si .y para eso debo comenzar por analizar que la primera preocupación que me propuse antes de asumir(la dirección del Hospital) fue cambiar radicalmente el ambiente físico de la emergencia. Siempre creí que la parte médica estaba capacitada para lo que viniera pero ante un quilombo grosso nos íbamos a ver superados por falta de infraestructura. Entonces, ante la falta de espacio, oxigeno, laringoscopio, iluminación, empiezan las órdenes encontradas, los gritos y la falta de coordinación y prioridades, y el que lo termina padeciendo es el accidentado. Por ese motivo es que decidí, como primera medida, la realización del pretendido shockroom, debiendo para eso desalojar hemoterapia con los inconvenientes del caso y crear un área de urgencias, cirugía y radiología integrado y con un único sentido de circulación y cierto aislamiento para poder trabajar tranquilo. A este espacio se lo dotó de oxígeno central, aspiración, iluminación, oxímetro, laringoscopio y demás instrumental de trabajo que pudiera responder en caso de una emergencia. El otro punto que me preocupaba era la conexión, contactos y dinamismo para la derivación a través del ministerio. Es por ello que cuando vinieron el ministro Zin y el director de emergencias de la provincia, Adrian Tarditti,tiempo antes de que pasara esto, les pedí vía directa con el CRES (Centro Regional de Emergencias Sanitarias). Además, les solicité que el equipo de trauma (cirujanos, anestesistas, traumatologos, etc.) fuera cubierto con médicos de Dolores, que conocen el hospital y las emergencias por todo el año y así fue que lo conseguí y se los ofrecí en forma solidaria por servicio, para que participaran todos. Esto fue la segunda pata; que junto con el espacio físico permitió tener un Servicio de Emergencias EN SERIO.Todo esto apoyado por la Gente del Operativo Sol en especial por Carlos, médico correntino capo en emergencias, y por todo el personal paramédico del operativo, incluido radio operador. Agregado a esto estuvo el apoyo por parte del ministerio con la ambulancia y el dinero que nos dieron para el equipamiento de la guardia y la respuesta de Camilo que siempre me dijo que si a todo lo que le solicite (al menos en esa etapa). Desde el 17 de diciembre que empezó la temporada se veía que la cosa venia bien, la presencia a toda hora en el hospital junto con Candelaria y Marcelo me permitía conocer todo el movimiento del Hospital. Empezamos con un accidente de motos de un diplomático brasilero y siguió con un triple choque en la ruta 41 con 7 menores accidentados, de ellos 3 graves. Ese día, si bien el espacio físico estaba acondicionado y faltaba equiparlo, se trabajó muy bien y en forma coordinada. Estaban Néstor Esquioga, Catino, la doctora Metz (que realizaba las ecografías en lo que ahora es el shockroom) de ahí a radiología y/o cirugía; Néstor y Catino que reducían las fracturas en la guardia vieja y creo que Soria y el cirujano, que era Bonavita, operaban en cirugía. Todo eso me dejó muy contento y veía que por fin teníamos una emergencia como la gente (dato menor y pelotudo hicimos una rampa en la entrada de ambulancias porque las camillas golpeaban al entrar y salir y nunca se hizo). Todo esto es anecdótico pero permite comprender lo que te decía al inicio, que todo esto del accidente salió bien porque tuvimos suerte y porque estábamos preparados. El día del choque del tren y el colectivo inauguramos la nueva guardia tipo cuatro de la tarde .Y a la noche estábamos en el recital de Leon Gieco; yo estaba con Leandro, mi hijo, y la gente del operativo al costado del escenario cuando viene el Comisario Puig y me avisa del accidente y de movida me di cuenta que era algo sumamente grave, ahí le dije a Carlos, el médico y a Maria José, que era vital que hicieran una selección o Triage correcto en la zona del accidente. Le dije a Puig que cortara la ruta en el distribuidor para tener un corredor sanitario sin problemas por la ruta 2 y la calle Lamadrid; a esta altura les debo comentar que íntimamente agradecí que esto ocurriera con todos despiertos…El resto de la gente del polideportivo y de la Fiesta de la Guitarra se ocupó de los del tren y cosas que después vimos que salieron muy bien (mantas, frazadas, café). Inmediatamente me fui al Hospital, estaba Zarate de guardia, se puso como loco y el equipo de trauma llegó al toque. Catino me demostró una faceta que no conocía de él, sumamente tranquilo y eficiente, Bonavita, De Piero y no recuerdo quien más en un inicio. De movida llegaron una nenita de dos años ,con traumatismo toráxico y craneoencefálico severo, que intubé y se la pasé a Zarate y a la doctora Outón , que pretendían derivar y no estaba en condiciones. Los primeros pacientes eran todos graves ,con amputaciones de miembros, fracturas expuestas, hemotórax y traumas craneoencefálicos severos, por lo que decidí numerarlos pegándoles un número en un brazo y el grupo sanguíneo en el otro (Zulma como siempre, de 10!), de ese modo como los pacientes estaban inconscientes se correspondía los analisis y las radiografias con el numero que tenian pegado; a su vez se fueron agregando médicos. Me acuerdo algunos en cirugía que operaba Bonavita, otros en tabla en el piso, Soria y Catino en quirófano algunos con torniquete en razón de miembro amputado o fractura expuesta sangrantes, scalp de cara etc y algunos que fueron derivados a Sanatorio Dolores y Regional pero no podían operarlos porque lo anestesistas estaban en el Hospital. A medida que se desocupaba quirófano del Htal venía Allegroni del Dolores con pacientes que entraba a quirófano y así fuimos coordinando. Al toque lo llamé a Tarditti que se vino para Dolores pero antes decretó ALERTA ROJA en los hospitales Gonnet, San Martín de La Plata , Instituto del tórax (me contó Fede Hauqui que estaba de guardia allá que a las 3am ya estaba bloqueado) Melchor Romero e Interzonal de Mar del Plata. De ese modo el corredor sanitario y la derivación de los pacientes graves se completaba y aseguraba. Después me enteré que la evacuación desde el lugar del accidente al hospital se hizo en menos de 1 hora y si bien al inicio nos sobrepasó la cantidad de pacientes el establecer prioridades y coordinarlas nos permitió salvar a la mayoría; sólo falleció la nenita de 2 años a la media hora de ingresar y un flaco estaba en terapia con respirador tipo 6 de la mañana. Tras el sacudón inicial ya había bastantes médicos. Guille Capella desde el inicio (un león) ,aparecieron Esquioga y Esteban (que estaban en un casamiento), la gente del operativo ya en el Hospital; Tarditti y gente del Ministerio… Ahí empezó otra función: la de director y manejar el despelote con la policía. La morgue era una pila de cadáveres y partes de personas y sabía que los muertos eran 16 o 17 y con la llegada de familiares empezaba otro despelote; pensé en el materno pero se iba desbordar también y por suerte se nos ocurrió el velatorio del cementerio. A científica les pareció bien así que adelante: ¡un quilombo menos!. Para ese entonces ya estaban los de Crónica, tres y media o cuatro y era todo tan acelerado que donde dudabas cagabas. Con los inspectores se acordonó el perímetro del Hospital; sólo pasaban médicos y ambulancias pero como muchos periodistas estaban en Dolores por el tema de Porreti de Pinamar, para la madrugada estaban todos jodiendo así que firme de movida con mi habitual cara de culo pero amable y pidiendo que nos dejaran trabajar la fuimos piloteando. El resto es por todos conocido la parte mediática no la tengo que contar porque todos la conocen y pido disculpas por los médicos que no nombro y seguramente estaban desde el inicio (COMO SIEMPRE). Asi fue transcurriendo todo y fuimos derivando los pacientes mas jodidos. Después aparecieron Zin y Scioli que se portaron muy bien(no les quedaba otra). Pondrían lo que necesitara, me aconsejaron que derivara todo y yo insistía que necesitaba el Hospital operativo. En el momento que Scioli hablaba por tel con La Presidente, me pidió de salir a algún lugar donde tuviera señal .Salimos a la entrada de ambulancias tipo 2 de la tarde y cuando el hablaba me pasan por otro tel de él con De Vido que preguntaba que necesitábamos. Estábamos en la escena nacional.. y me avisan de otro accidente y les pido que despejen porque teníamos que seguir laburando con otro accidente más, los tipos no lo podían creer y realmente por dentro me reventaba de orgullo de nuestro Hospital , los Médicos y el Personal que teníamos. Me olvidaba que también fue la primera vez que el grupo de Psicólogos de Dolores trabajó codo a codo con nosotros individualizando personas o familiares derivados o ayudando y conteniendo a familiares. En lineas generales, eso es mas o menos lo que sentí y viví. Terminamos ese domingo tipo 9 de la noche con una sola paciente internada, operada y porque quiso quedarse… Antes de irme sentí la necesidad (y fué lo ultimo que hice) de pasar por cada office y sector del hospital para agradecer y felicitar por lo realizado a cada enfermera, mucama, administrativa, portero. Está de más resaltar la tarea de mi mano derecha CANDELARIA. Qué puedo agregar a lo que ustedes conocen…. Como reflexión final, el curso de emergencias que organizamos con la gente del Ministerio para estar mejor la próxima vez creo fue un éxito por la cantidad de inscriptos, el nivel de los temas y lo participativo. ASIMISMO EL ORGULLO por las circunstancias de la vida que me permitieron compartir con los médicos y el personal del HOSPITAL tamaña experiencia y solicitarles, ahora que los tiempos cambiaron, que lo cuidemos más que nunca porque ese día “hicimos lo que hicimos”: el HOSPITAL. DOLORES Y NOSOTROS LO MERECEMOS.” Saludos, Roberto.